Esto es morboso en exceso [Cesar +18]

Le segui el beso con dulcura y depacio, totalmene diferente que hace unos minutos llenos de lujurias como si fuera un drogadicto y ella mi eroina, me puse las manos disfrutando del beso.

Sonrei contra sus labios divertida. Como cambiaban los besos de un momento para otro. Me separe un poco de el con una especia de medio bostezo en los labios. Me dejé caer sobre el y le abracé por la cintura.

Sonrei al ver que bostezaba. -anda duerme un rato princesa-
Bostece y tambien y me dedique a acariciarle el pelo

Sus caricias en mi pelo me relajaban mucho. Bese su mejila cerrando los ojos, sintiendo como las fuerzas me abandonaban y quedando dormida antes de lo que imaginaba.

La acomode a mi lado abrazandola y tapandola bien,
la mirana sonriendo como dormia mientras acariciaba su pelo.

Me removi en sueños. *Estaba en un pasillo oscuro y corria a toda velocidad huyendo de algo. Algo con mucha prisa por atraparme, me gire con la varita en alto pero varios rayos de luz verde paso cerca de mi golpeando una pared. Mire frente a mi y....* Me desperte de golpe con la respiración agitada, muerta de miedo. Me mordi el labio y mire a Cesar tragando saliva con la cara palida.

Me sobresalte al verla tan palida, la abrace contra mi.
-Ya rose, ya solo era un sueño tranquila- Bese su pelo para tranquilizarla

Oculte mi cara en su hombro. -Habia muchos.- dije a media voz y ronca. Me encogi contra su cuerpo abrazandome a el con fuerza controlando mi respiración. ¿Cuantos habia visto? ¿Diez? Trage saliva mordiendome el labio.

-Muchos que rose?-
Estaba temblando, la aprete mas contra mi acariciandole el pelo, aciendo que se sintera portegida

Levante la cabeza aun algo palida. -Mortifagos.- fué mas bien un susurro ahogado. ¿Cuantos de ellos habria ya en el colegio? Tenia miedo, por todo el mundo incluso por el, ¿que pasaria si decidian que Cesar ya no les servia para nada?

-Te he dicho q por eso no te preocupes princesa- suspire algo asustado, era verdad que habia muchisimos mortifagos ya.. pero no queria decirselo.
-No va a pasarte nada- Bese su frente

Me levante, quedando senta dandole la espalda, por mucho que me dijese que no me preocupase no podia evitarlo. -¿Cuantos hay en el colegio?- pregunte temblorosa pegando mis piernas a mi pecho.

La abrace por la espalda besando su empiece de columna.
-Rose yo...nose..si puedo contartelo- Suspire, que hacer? contarselo? no contarselo?... -Hay por lo menos 10 mortifagos ya- dije en un susurro

Tragé saliva ausente. Diez mortifagos...los mismo que habia visto yo. Suspire preparada para lanzar la siguiente pregunta. -¿Quien los controla?- No sabia si de verdad queria saber si habia alguien detras de tanto mortifago pero la pregunta ya estaba echa. Acaricie su mano cariñosa.

Me quede callado, mirando su espalda, no sabia si contarselo, podia ponerla en peligro, a ella y a mi y a mi familia, segui en selincio lo que me parecio 10 minutos enteros, cerre los ojos y dije un murmullo casi inaudible -Angel Riddel-

Espere pacientemente, a cada minuto el pecho me dolia mas y mas. Realmente no queria saber la respuesta, no tenia que haber preguntado. El corazón me dejo de latir al escucharle susurrar. No podia haberlo oido bien, seguro que no lo habia oido bien. Me abrace a mis piernas palideciendo. -No...- me dije a mi misma en voz alta. Eso era, no habia oido bien y listo ademas no necesitaba saberlo.

Deje caer mis brazos abatidos y deje mi frente en su espalda desnuda, uno habia fallado a mi señor y lo hiba a pagar caro, un crucio si descubria q yo lo habia delatado a la orden y lo que mas me dolia, ver a rose temblar de miedo y no poder hacer nada para consolarla, para colmo me dolia el antebrazo, me estaba llamando... y no queria ir...
-Rose...losiento-

Negué con la cabeza. -No importa.- Me gire para mirarle, le cogi por la barbilla para que me mirase. -No voy a decirselo a nadie. Esto no va a salir de aqui lo juro.- le dije perdiendome en sus ojos verdes. Uni me labios a los suyos en un beso corto abrazandole.

La abrace contra mi pecho, estaba muy cansado y no sabia porque, necesitaba echarme en el sofa y cerrar los ojos, y eso hice, deje a rose en mi pecho abrazada y me tumbe cerrando los ojos.
-Confio en ti se que no lo diras a nadie...- Me quede dormido en cuanto termine la frase

Sonrei al ver como se quedaba dormido. Cogi la manta y nos tapé con ella. Me quedaria las horas muertas mirandole dormir y la verdad esque asi lo hice. Me perdi en cada una de las perfectas facciones de su rostro.

Fruncia el ceño mientras dormia pues el dolor del antebrazo cada vez era mas fuerte, tensaba el brazo izquierdo apretando el puño, aun dormido, movia la cabeza como si quisiera despertar de un mal sueño, pero no soñaba nada, solo habia oscuridad dentro de su cabeza.

Le mire preocupada, parecia pasarlo mal. Le cogi el brazo izquierdo con cuidado. No estaba segura de si queria verlo pero parecia que le dolia y si queria saber porque. Comencé a deshacer el nudo de las vendas con cuidado de no despertarle. Retire las vendas con los ojos cerrados, cogi aire y abri los ojos lentamente. Alli estaba, la marca solo que esta vez la serpiente se movia. Me quede de piedra por el miedo la impresión.

Agarre el brazo de rose fuerte pero sin acerle daño con la mano izquierda y abri los ojos lentamente.
-Porfavor dime que no se esta moviendo- pedia a gritos mirando al techo que estubiera quietta incluso q me mintiera

Me sobresalto sentir su mano rodeando mi brazo. Parecia pasarlo mal. No podia decirle que se estaba moviendo por lo que negue con la cabeza. -No se mueve. Tan solo queria verla.- dije con media sonrisa y volviendo a ponerle las vendas como si tal cosa.

Suspire tranquilo,
-Temia que me estubiera llamando, sera que me duele como a regresado el- La mire con cariño -te quiero-