Lo que hace no tener nada que hacer (LIBRE)

Habia salido a dar una vuelta por los terrenos, iba pensando en lo mio, caminando sin rumbo fijo, iba a donde mi subscosciente me llevaba. Acabé en el lago, exactamente en las cascadas que habia por allí cerca, cuando vi el agua fue como si saliera de mi trance, aunque no me importó haber acabado allí, era uno de mis lugares preferidos en Hogwarts.

No me había dado cuenta como había terminado allí, solo recordaba haber estado fumando mientras caminaba y sin prestar atención realmente a dónde iba. Pero ya no importaba, ya estaba allí y no iba a desperdiciar todo el tiempo que perdí caminando. Había acabado en las cascadas del lago, no era mi lugar favorito, pero tampoco estaba nada mal para relajarse. Me acerqué un poco para agarrar agua y se me cayó el cigarro.
-Agg! Mierda! - susurré por lo bajo mientras lo apagaba.

Me senté sobre una roca, mirando al lado contrario de donde estaban las cascadas, es decir, al caminito que habia hacia allí. Ví a una Gryffindor hacercarse al agua y cuando se le cayo el cigarro me rei, sin apartar la vista de la chica, ya que para ser Gryffindor no estaba nada mal

Me quedé mirando mi cigarro por unos segundos hasta que oí una risita, rápidamente busqué el lugar de donde provenía y encontré a una chica que me miraba.
-Qué miras? - dije con rudeza.

Miré a mi alrededor, no habia nadie más por allí. Me levante de la piedra y me fui acercando a ella despacio, con ua sonrisa divertida en la cara
- ¿Que que miro? Lo que haces, ¿o es que no se notaba que andaba mirandote a ti?

Su mirada era... no sé, nunca antes la había visto, pero claro, eso nunca iba a intimidarme.
-Que quieres? - pregunté con más rudeza, sin moverme de mi lugar y estudiándola de arriba a abajo como con repulsión.

volví a reirme ante su tono de voz y su postura "a la defensiva", que desconfiados eran los Gryffindors con nosotros, siempre estabamos igual
- Oh vamos, tranquilizate un poco morena, el primer día no suelo morder
dije torciendo una media sonrisa, enseñando mis perfectos dientes

Pero que diablos quería está chica? Me estaba poniendo nerviosa, algo nada común en mí. Tal vez la razón era que no sabía como interpretar sus miradas o sus palabras.
-Alejate de mi - dije empujándola un poco, para darme espacio y caminar hacia el castillo.

Me divertia ver lo confusa que estaba la chica, y además parecia algo nerviosa, ¿era ese el efecto que provocaba en las personas? Parecia ser que si
- Venga relajate, ¿no me tendrás miedo verdad?
dije tratando de picarla

Me volteé furiosa al oírla, eso es lo que más me cabreaba. Me acerqué a ella y dije:
-Yo? Tener miedo? - solté un bufido, sarcástica - Ya quisieras, niñita