Amaneciendo {Miss Rosebud}

No queria hablar pero no pude aguantar, necesitaba hablarlo con alguien asique explote. -No que va, no ha hecho nada. No es que sea un creido insufrible, que se crea muy especial, ni tampoco es que me guste. Y por nada del mundo le he besado nunca. Y para nada me ha dicho que quiere ser mortifago para protegeros. ¡No que va!- dije intentando no gritar y apretando la mano que tenia libre hasta clavarme las unas en la palma mirando al suelo furiosa. Sabia que a lo mejor, casi seguro, segurisimo, me habia pasado y no tenia que haberle hablado asi a Pete pero esque necesitaba desahogarme.

Me reí por su descripción de mi hermano, vamos que se habian besado y estaba coladito por él y este le habia dicho lo de quería ser mortífago.
-Claro eso nunca podría ser verdad porque mi hermano no es un capullo aunque en el fondo lo quiera-me reí y miré su mano-. Cuidado no te vayas a hacer sangre-le advertí observando como se clavaba las uñas-. Vamos resumiendo os llevais de perlas

Suspire tranquilizandome y abriendo la mano. Me la mire, tenia las marcas de las uñas en la palma. Sonrei un poco. -Que va somos uña y carne.- dije sarcastica. El no parecia haberse alarmado por lo que dije de su hermano el mortifago por lo que supuse que la famila Bremmer estaba al tanto de las estupidas ideas de Cesar. -Es que no entiendo porque quiere hacer eso.- dije sentandome en las escaleras de entrada al colegio y pasando un dedo sobre mis labios.

Suspiré y me senté a su lado en las escaleras y contesté a su pregunta:
-Según él es para protegernos aunque no sé que es lo que quiere proteger porque podemos protegernos por nosotros mismos no necesitamos que cometa estupideces-negué con la cabeza-. A veces no sé, creo que.. se cree papá o que no sé, nos quiere sí pero es... no sé no quiero tener un segundo padre, quiero tener un hermano que haga su función de hermano y no arriesgue su vida por una causa que no tiene sentido-torcí el gesto.

Bufé y apoye la cabeza en las manos. -He intentado disuadirlo, pero ya es tarde. No se que hacer. Cree que hace lo correcto pero no es asi, los mortifagos no os protegeran si el se niega a hacer lo que le ordenen, y se que lo primero que le diran que haga sera matar un sangre sucia, probablemente alguien que conozca para demostrar su lealtad. Y yo no veo a Cesar matando a nadie, la verdad. El es bueno, se que no podria hacerlo.- dije desde detras de la muralla que hacia mi pelo sobre mi cara. Estaba defendiendo a Cesar ¿Me habia vuelto loca?

Me encogí de hombros y le confesé lo que habia pensado tras la regañina con Cesar antes del curso:
-Yo pensé en hacerme mortifago también-bajé la vista- pero solo para proteger a mi hermano, pero... soy demasiado cobarde para ello y no quiero que Alysa se lleve decepciones con todos nosotros -alcé la vista-. Ni mis padres.Suficientes preocupaciones tienen conmigo solo para que ahora mi hermano vaya y... no está ayudando para nada

Abrace a Peter por los hombros. -No sigas los pasos de Cesar, seria un palo muy grande para Alysa.- dije acariandole la espalda con cariño. Peter era como mi hermano pequeño, lo queria tanto como a Hugo y no soportaria verle convertido en mortifago. Ya me dolia ver a Cesar el simple echo de imaginarmelo a el me destrozaba por dentro. -El ejercito os protegera, yo os protegere. Tu no hagas nada de loque puedas arrepentirte.- dije abrazandole con fuerza, estrujandole entre mis brazos.

Me abrazaba con fueraz y me dejé abrazar, sabiendo que por su mente cruzaba mi hermano, apenado le susurré:
-¿Te ha hecho daño?
No me gustaba ver a Rose así era como otra hermana mayor para mí, una buena amiga en la que confiar y mucho más desde este momento. Era un apoyo para el día a día.

Mi cabeza esta a horas de alli. En la sala del espejo. Me hubiese gustado saber que me hubiese mostrado. Apenas eschuche lo que me pregunto. -¿Eh? ...¡Ah! No, fisico no.- dije sin pensar y tratando de hacer volver a mi cabeza a la realidad. Me aleje a toda velocidad del espejo que nos reflejaba a Cesar y a mi. Miré a Pete con la cara algo descompuesta sintiendo como el pecho se me quebraba de dolor. Segui abrazada a Peter frotando su espalda con cariño.

Suspiré negando con la cabeza.
-No físico no, me refiero a si te ha herido si te ha hecho sentir mal-alcé la cabeza mirándola observando su rostro algo apenado e ido en otro sitio pensando en algo que tendría que ver con el tema a lo mejor con algun vez que estuvo con mi hermano.

Cerre los ojos con fuerza, no queria llorar, queria parecer fuerte, como si todo aquello me resbalase. -Bueno...esto...me ha molestado si. Me parece una estupidez.- murmure encogiendome sobre mi misma si dejar de acariciar el brazo de Pete. Me parecia increible que siendo tan pequeño pudiese darse cuenta de todo lo que pasaba por mi cabeza. Parecia incluso saber en que pensaba en ese momento. Los ojos cerrados se me anegaron de agua y los aprete con fuerza intentado que las lagrimas no saliesen a flote.

La observé y agaché la cabeza haciendose el silencio, solo se escuchaba el trinar de los pájaros a primera hora de la mañana, aún nada más. Notaba su mano sobre mi brazo, bostecé cansado estropeando el momento. Definitivamente, viva yo siempre estropeaba todo, y cuando digo todo, es todo.

Le oi bostezar y rei por lo bajo rascandome el ojo con la mano libre. -Venga vamos, tienes que descansar.- dije abriendo los ojos, ya secos. No queria interponerme entre Pete y una cama comoda y calentita. Me levante tirando de el y rascandome la mejilla. Ya habia tenido suficiente Cesar por un dia y habia arrastrado a Peter a mis angustias estupidas. Bufé y le mire con una sonrisa tirando de el hacia dentro del castillo.

Se rió y me "obligó" a levantarme, renegué pero al final acabé en pie y nos dirigimos de nuevo hacia el castillo.
-Si ahí se puede dormir bien-le dije y sonreí-. El suelo tan... ammm mullido y blando-dije divertido, todo menos eso era el suelo, bueno todo todo no, pero casi.

Rei en voz baja intentando hacer el menor ruido posible.-Oye si te quieres quedar a dormir en las escaleras por mi perfecto, asi no tendre que tirar de un niño zombie hasta su sala común.- dije divertida aún tirando de el. Por nada del mundo dejaria que Pete, mi pequeño Pete, durmiese en el suelo frio del castillo. Le revolvi el cabello con una sonrisa, contenta de poder contar siempre con Peter.

Me reí.
-Perdona pero no soy un niño zombie-dije mientras subiamos las escaleras hacia Hogwarts y negaba con la cabeza.
Bueno habia sido un acierto encontrarse con Rose, algo más unia nuestra amistad.

Negue muy seria.-Tienes razon...no eres un niño zombie...eres un lobo zombie.- le dije al oido divertida. Le cogi de la cintura y le eleve un momento y despues le deje en el suelo con delicadeza continuando con el "paseo". Le revolvi el pelo con una risa que resono por las paredes del pasillo.

Me reí por lo que me dijo y luego me cogió por la cintura lo que hizo que mis mejillas se tornasen rojas, para luego dejarme en el suelo y revolverme el pelo sonreí divertido y acabé riendome al escuchar su risa contagiosa mientras avanzabamos por el pasillo

Le mire las mejillas. -Y yo que pensaba que era la unica que se sonrojaba en el castillo- dije entre risa y risa, dando una vuelta sobre mi misma haciendo que mi capa ondease detras de mi. El estomago me rugio un poco. Despues de llevar a Pete hasta su "casa" me iria directa al gran comedor.

Me reí por lo que dijo a pesar de que mis mejillas continuasen rojizas
-No me pongo rojo es la luz-dije morando hacia otro lado.
Ya claro la luz, y yo era papá noel ¿yo era papá noel? Pues vaya que raro yo creía que no. Tenía unas ganas enormes de llegar a la sala común y tirarme en mi cama y dormir hastaaa las 8 de la tarde.

Le saque la lengua divertida. -Claro , como las luces del castillo son rojas se reflejan en tus mejillas ¿no?- dije agarrandole de la mano otra vez. A veces Peter me parecia mucho mas mayor de lo que era y en otra ocasiones lo veia tan pequeño que no podia evitar el estrujarle contra mis brazos y preocuparme de que no le pasase nada, aunque ahora que sabia el secreto de su licantropia ya no lo veia tan indefenso. -Anda, anda...vamos a darnos prisa en llegar hasta tu casa y que puedas dormir.- dije esbozando media sonrisa.

Me reí.
-Que si que son rojas que yo lo sé-le dije sacandole la lengua divertido mientras continuabamos caminando la verdad es que estaba deseando tirarme sobre la cama no a sino sobre ¿vale?

Sonrei negando con la cabeza. Pete parecia estar agotado asique apresure un poco el paso para llegar cuando antes... ya solo nos quedaba un pasillo.-Y ahora directo a la cama ¿vale?- le dije con voz autoritaria pero con una sonrisa divertida en los labios.