Amaneciendo {Miss Rosebud}

Un ultimo aullido más bien un llanto ,resonó en el bosque y parte de Hogwarts, de la bestia que se escondia con los rayos del solMe desperté en las raices de un arbol con los labios manchados de sangre que me limpié con el brazo desnudo, genial, bufé ¿ahora donde estaba mi mochila con mi ropa? suerte que no estaba muy lejos de allí, encontré la mochila y me puse la ropa que había en su interior, se quedó sentado apoyando la espalda en el tronco del arbol, cansado y ojeroso, claramente no había dormido había estado toda la noche "de caza" por suerte esa noche nunca habia alumnos.

Estaba despierta mirando por la ventana de la sala comun. Todo lo que habia pasado con Cesar no me habia dejado dormir. Vi una especie de sombra moverse entre los arboles del Bosque prohibido y acto seguido un aullido parecido a un lamento que provenia desde alli. Tome sin pensar la capa y la varita y baje a toda velocidad por las escaleras hasta llegar a las puertas del castillo que ya estaban abiertas. Sabia que lo que estaba haciendo era peligroso pero necesitaba adrenalida para regresar de mi estado de shock. Corri hacia el borde del bosque y me adentré en el sin pensar y corri sin rumbo con la varita en alto. Escuche ruidos a mi derecha y corri hacia allí. Vi una figura, bastante mas bajita que yo y mas menuda, de pelo corto. ¿Todos los Bremmer tenian secretos o qué? Peter, el pequeño de los bremmer estaba sentado en las raices de un arbol ojeroso. ¿Habia pasado la noche aqui? -¿Pete?- susurre temblando, de frio y algo de miedo.

Escuché unos pasos, abrí los ojos y vi la silueta de Rose Weasley que me había llamado, asentí con la cabeza y sonreí como si aqui no hubiera ocurrido nada de nada.¿alguien ha visto algo?no, pues yo tampoco hala. Me levanté del suelo y me dirigí hacia ella con mi mochila al hombro ahora vacía.
-¿Que haces aquí tan temprano?-le pregunté frunciendo el ceño-. Es peligroso-la advertí, si hubiera estado allí unos minutos antes no hubiera sido responsable de mis actos. Ella estaba temblando ¿tendría frío? Me quité la chaqueta que llevaba sobre la camiseta y se la tendí aunque seguramente le estaría pequeña

Genial, habia salido de un estado de letargo para entrar en uno de shock. Cogi su chaqueta y me la puse sobre los hombros por encima de la capa. Carraspeé extrañada. -Un momento. ¿Acabas de decir que esto es preligroso? ¿Y tu que haces aqui?- dije mirandole con la cabeza algo gacha para mirarle fijamente. ¿Pero de que iva el enanito? Esboce una sonrisa divertida pero extraña mientras intentaba poner en orden mi cabeza. -Haber, ¿que hacias tu aqui si puede saberse Pete?- Me preguntaba su habia visto lo que yo habia visto desde la ventana de la torre.

Sonreí de forma cansada ante su pregunta y contesté buscando una excusa de forma rapida, una excusa penosa.
-No podía dormir así que estuve dando una vuelta por el bosque-comenté- y se me hizo la mañana-me encogí de hombros.
Por merlin que mal mentía ¿por qué no sabia mentir yo si habia gente que lo hacia a la perfeccion? Ah espera, yo era huffie, eso no explicaba nada pero bueno simplemente me intentaba consolar que como no sabia mentir estaba en hufflepuff aunque supiese que no era asi pero bueno.
-Además era luna llena- se me escapó, me debía haber callado lo que había dicho hasta el momento estaba bien pero eso tan solo ya lo explicaba todo.
Ya no podía corregir lo dicho Rose se quedaba con todo y era muy lista así que de seguro ya lo había pillado

Alce la ceja esceptica. -Mentir esta mal Pete.- dije ante su primera frase. La segunda me dejo helada ¿Luna llena? ¿Que tenia que ver la luna en todo esto?
Me lleve las manos a los labios, mordisqueando mi dedos pensativa. ¿Un niño solo en el bosque? ¿Luna llena? ¿Parecia cansado?
El padre de Meda y Teddy tenia todos esos sintomas. El tio Harry nos lo explico a James y a mi.
-Un momento...-murmure. -Peter, ¿Hay algo que quieras contarme?- dije mirandole curiosa. Mi cerebro era bastante rapido uniendo ideas y ya sabia el motivo por el que Peter estaba en el bosque, pero queria darle la oportunidad de explicarse.

Bajé la mirada mientras ella pensaba para alzarla a los pocos segundos, la chica pensaba rápido la verdad, escuché su pregunta y me encogí de hombros contestando:
-Creo que no.
Pero ante su mirada torcí los labios pues sabía perfectamente a lo que se refería y ella sabía perfectamente que yo lo sabía.{eins?¿}
-Cuando tenía era pequeño me mordió un hombre lobo-resumí, contenia muchos datos y estaba muy resumido, y tanto.

Se me descolgo la mandibula de su sitio dejando la boca semi abierta por la noticia. Lo habia supuesto pero que las palabras saliesen de su boca me dejo sorprendida. -Va-vaya. Un pequeño hombre lobo en Hogwarts.- dije temblando.
Mi vida habia dado un vuelco por culpa de los tres Bremmer. Suspiré y me agache para coger las manos de Pete. -¿Como estas?- Me asombraba a mi misma lo pronto que era capaz de asimilar noticias tan fuertes como esas. Mi actitud relajada me daba incluso miedo, pero claro está, Pete siempre habia sido mi amigo y me gustaba cuidar de el.

Sonreí por lo que dijo parecía asustada o sorprendida no sabía, me cogió las manos y me preguntó como estaba me volví a encoger de hombros, mis mejillas se sonrojaron ante el contacto con sus manos y contesté:
-Con sueño ¿tú?
Pero eso se arreglaba quedandose en la enfermeria toda la mañana saltandome las clases con un justificante siempre lo hacía así que no había nada fuera de lo común.
-Por cierto aún no me dijiste qué hacias por aquí. -le recordé metiendo las manos en mis bolsillos del pantalón.

Sonrei tranquilizada ante sus palabras. Me incorpore de nuevo metiendo las manos dentro de mi capa. Carrapeé para aclararme la voz y contestar. -Bueno...no podia dormir y estaba mirando por la ventana y te vi, bueno vi tu sombra en realidad. Necesitaba algo de para hacerme salir de....bueno que vine sin saber porque.- concluí. Mi explicacion estaba algo incoherente pero se entendia un poco. Trate de no parecer estupida y sonrei algo divertida mientras segia mirando al pequeño Peter jugando con mis dedos dentro de mi capa, debajo de la cual, me acababa de dar cuenta, llevaba el pijama. Suspire cansada.

Alcé una ceja divertido por su respuesta tan poco explícita y me restregué los ojos con la mano para luego revolverme el pelo.
-Algún día acabaré teniendo pulgas-dije divertido.
Para mi la licantropía ya no era lo que desde fuera le podía parecer a cualquiera pero claro yo tenía 13 años, era doloroso al principio de la noche eso si lo podía asegurar lo malo era que luego no sabías lo que habias hecho y era como tener una laguna de esa noche en la mente a veces resultaba molesto pero había comprendido que no le haría daño a nadie mientras la gente no entrase en el bosque.

Sonrei y comence a andar hacia el principio del bosque. -Vamos que necesitas dormir.- dije instandole a salir del bosque cuanto antes. Se me hacia extraño que el pequeño y adorable Peter Bremmer fuese un hombre lobo, recé para que no fuese uno de esos que eran sanginarios y malvados. Me aclare la garganta. -¿Puedo preguntarte...como es?- dije en voz baja miradole la coronilla mientra me abraza el pecho para no tener frio. Las noches en Hogwarts comenzaban a hacerse frias y agotadoras. Di un par de salto intentando entrar en calor mientras esperaba su respuesta.

Torcí los labios ante su pregunta mientras saliamos de la espesura del bosque pensé mi respuesta y contesté finalmente mirando al suelo y algo inseguro.
-Al principio duele... duele mucho y luego no sé es como si yo no fura yo, a veces recuerdo cosas a veces no, es.. como si conviviesemos dos seres dentro del mismo cuerpo y yo no puedo actuar-me encogi de hombros resultaba un tanto frustrante-. Pero no suelo recordar lo que hago, para mi mejor.

Off: me voy a clases particulares de ingles vuelvo en una hora o asi

Frunci el ceño mordiendome el labio. No recordar nada debia ser muy frustrante. Era como ir sonambulo...pero mucho mas peligroso y salvaje. Acaricie su pelo revolviendolo. -Bueno, me alegro que hayas confiado en mi para guardarte el secreto.- Dije con una sonrisa. Acababa de convertirme en la guardiana de los secretos de la familia Bremmer. Extendi mi mano hacia el para que me la diese y llegar juntos al castillo. -Y te prometo que nadie se enterara de esto, a no ser que tu quieras que yo lo cuente.- dije esperando que me cogiese la mano.

Sonreí acepté su mano.
-Confío en tí-sonreí mientras continuabamos caminando, la verdad no es que me molestase que la gente lo supiese gente como Rose me refiero, pero si lo supiese todo Hogwarts me mirarian raro yo no miraba en el futuro sino en el presente, una noche habia oido a mis padres hablar y pensaban que en pocos lugares de trabajo me querrian contratar, pero bueno me daba igual.

Caminamos hacia el castillo. Mi cerebro estaba tratando de asimilar toda la información. Todo lo que sabia sobre los Bremmer, todo sobre Alysa, Cesar y, ahora, el pequeño Peter.
-¿Siempre estas solo aqui?- pregunte curiosa. Sabia que Remus habia contado con ayuda de tres animagos en las noches de luna llena y me preguntaba si en el caso de Pete tambien habia alguien. Quizas Alysa le hiciese compañia, y a lo mejor algun otro animago del colegio tambien le acompañaba. La idea del pequeño Pete solo por el bosque, aunque fuese en forma de lobo, me aterraba bastante.

Escuché su pregunta y negué:
-No, suele acompañarme Alysa pero esta noche no porque la mandé a dormir antes de que anocheciera -me encogí de hombros-. Pero suelo pasar esas noches aquí con ella
Miré al suelo y luego alcé la cabeza y le pregunté inclinando la cabeza:
-¿Tú crees que soy un monstruo?

Justo como habia imaginado. Supuse que Aly se transformaria en Shek para hacerle compañia. Sonrei ante su pregunta. -¿Porque iva a creer eso?- pregunte retoricamente mientras balanceaba nuestras manos. -Por supuesto que no lo creo. Pareces tonto Pete. Eres mi amigo, jamas pensaria eso.- dije riendo un poco mirando como el sol salia cada vez mas.

Me encogí de hombros y sonreí:
-No sé es que como en los libros de defensa contra las artes oscuras y en criaturas magicas y todo eso lo ponen como algo.. no sé tabú pues-me encogí de hombros-. Soy raro-negué con la cabeza y reí-. Pero eso mola.
El sol brillaba cada vez más denotando la silueta de Hogwarts y haciendo brillar sus ladrillos de piedra, sus murallas

Resople negando con la cabeza. -El libro de DCAO a veces es muy alarmista.- comente como quien comenta que ha visto una bellota en el suelo, aburrida. Mire hacia el castillo, parecia resurgir de entre bancos de nuiebla, dibujando su imponente silueta en el cielo con sus ladrillos brillantes al sol. -Tu molas mucho Peter.-dije riendo un poco y acercandonos cada vez mas al castillo.

Me reí:
-Bueno mucho mucho...-dije moviendo una mano en señal de desaprobación-. Tú si molas Rose-la abracé sonriendo, ella sabía mi "secreto" y lo guardaría a pesar de que le dijese lo contrario y sabía que era una buena amiga, mía y de mi hermana ¿conoceria a Cesar? A lo mejor sí.
-¿Conoces a mi hermano Cesar?-le pregunté con curiosidad sin venir al caso mientras me separaba de ella

Le revolvi el pelo cuando me abrazo riendo divertida.
El estomago me dio un vuelco cuando pregunto por Cesar. -Em...si claro. Conozco a Cesar. A todos los Bremmer en realidad.- dije con una sonrisa mas falsa que una casa de caramelo. Conocia a Cesar mas de lo que yo queria. Esa tarde me habia enterado de las inclinaciones mortifagas del moreno y me habian sentado como una patada en el culo, la verdad. -¿Por que?- pregunte tratando de parecer normal.

Me encogí de hombros.
-Nada por nada, no sabía si lo conocías eso era todo-suspiré acordandome de mi pelea con mi hermano aquella mañana de verano antes de entrar a Hogwarts cuando yo estaba enfermo y le solté ahí todo lo que pensaba de los mortífagos y lo que pensaba, esperaba que todo aquello se le hubiese pasado y no hubiese cometido ningna estupidez de la que luego habria que salvarle el pellejo, aunque el quisiese hacer lo contrario, salvarnos a nosotros.

Sonrei revolviendole el pelo. -Pues si, conozco a Cesar...no se si por suerte o desgracia.- añadi en voz muy baja, para mi misma. Me preguntaba si Pete sabia que su hermano tenia la determinacion de ser mortifago, su sabia que su hermano habia sido marcado con la absurda idea de protegerles. Era un buen motivo, muy noble...pero estupido, jamas debes fiarte de lo que diga un mortifago, nunca. Aprete los dientes rabiosa.

La observé y vi como apretaba la mandíbula agaché la cabeza preocupado y le pregunté:
-¿Ha hecho algo?-si ella conocía muy bien a mi hermano y sabía lo que quería hacer entonces sabía de lo que le hablaba.Yo ya le habia dejado claro que era un capullo pero bueno, era su vida no la mía segun el era para protegernos pero no veía el porqué, nos podíamos defender solos perfectamente, por lo menos yo podía si me daban la ocasión, o eso creo.