¿Nos divertimos? [Scorp +18]

Llegamos hasta la orilla del lago, yo tirando de Scor con una sonrisa bastante ancha en la cara. Busque un arbol que nos protegiese del sol y el calor. Vi un par de arboles que daban una sombra bastante grande y que protegian de miradas curiosas y fui hacia alli con determinación. Me sente acomodandome entre las raices y tire del pantalon de Scor para que se acercase con una sonrisa entre pícara y divertida. -Esto es mucho mas comodo ¿no?-

Llegué hasta el lago detrás de Rose, que tiraba de mi mano. No podía evitar ir sonriendo. Observé cómo se agachaba, acomodándose entre las raíces de un gran y robusto arbol.
- Mmm.. no se -dije respondiendo a su pregunta- Habrá que comprobarlo, no?
Me agaché acercándome a ella, y la recosté hacia atrás sin despegar mis labios de los suyos.

Sonrei ante su cometario, no podia evitar sentirme feliz y un tanto estupida tambien , pero ante todo feliz. Abrace a Scor pasando mis brazos por su espalda y dejando que me tumbase, literalmente. Recorri con mis labios el camino desde sus labios hasta su cuello y a la inversa. -Yo creo que se esta bastenate bien.- dije antes de volver a besar sus labios.

Me quedé tumbado sobre ella, cubiertos por las ramas, apartados de miradas ajenas. Sentí sus besos por su cuello, que hicieron que mi piel se erizase. Siempre había sido mi punto debil.
La tumbé del todo, apartando su pelo, dejando su cuello libre para poder besarlo libremente mientras metía las manos por debajo de su camiseta, acariciando su tripa.

Cuando su fria piel entro en contacto con la piel de mi estomago este se estremecio haciendo reir. El cuello era mi punto debil... no podia evitarlo se me erizo la piel y me estremeci. Aproveche para poner mis manos sobre la parte delantera de su camisa, metiendo las manos por debajo, recorriendo todo su pecho con mis manos avariciosas.

Sentí sus caricias por mi torso. Tenía las manos frías a pesar del tiempo que hacía, pero no me importó. Seguí besando su cuello, bajando ahora por su clavícula, su garganta y finalmente, su escote.
Comecé a desabrochar los primeros botones de mi camisa.

Comence a remangar la camiseta de Scor , comprobe que lo mas probable esque el tendria que retirar sus manos de mis botones y eso no me convenia, asique comence a rasgar su camiseta. -ESpero que no te importe que la rompa- No espere su respuesta y la rasge del toda y la lance contra un arbol que teniamos detras. Acaricie de nuevo su pecho observandole con la respiración agitada.

Ví cómo comenzaba a rasgar mi camisa sin darme tiempo de replicar, aunque tampoco lo habría hecho. Con unos padres ricos, ¿qué importa una camisa?
Sonreí con picardía mirándola de arriba a abajo. Mal. Exceso de ropa.
Cogí su camiseta del borde inferior y tiré hacia arriba, sacándosela por la cabeza. Miré su cuerpo, me mordí el labio y volví a besarla. Primero en los labios, hasta bajar a sus pechos.

Deje que me desnudase con tranquildad, en otra ocasión me hubiese muerto de vergüenza pero con Scor me sentia diferente, muy...bien, excesivamente bien y feliz. Le mire mordiendome el labio mientras me besaba. Utilice mis pies para sacarle los zapatos y dirigi mis manos al broche de su pantalon deslizandolas por su torso mientras bajaba. Me incorpore un poco y gire sobre mi misma haciendole quedar tumbado. Me sente sobre su piernas y baje hacia su broche de su pantalon besandole el pecho. Desabroche el botón de su pantalon y le mire divertida.

Sentí un cosquilleo cuando noté sus manos descendiendo por mi cuerpo, directas al broche de mi pantalón.
La dejé que se pusiese sobre mi, sentándose sobre mis piernas. Puse las manos sobre su cintura y sentí sus besos por mi pecho, haciendome cerrar los ojos para disfrutar más.
Cuando noté que desabrochaba mi pantalón, abrí los ojos, pudiendo ver como me miraba trviesa. Sonreí deseando que siguiera.

Sonrei de nuevo y baje la cremallera del pantalon. Deslice el pantalon por sus piernas hasta sacarselo totalmente. Subi hasta sus labios para besarlos con una pasión rara en mi, acariciando su pecho.

La ayudé con mis piernas a quitarme los pantalones, y cuando volvió a besarme, puse is manos a ambos lados de su trasero, por dentro de su pantalón, el cual empezaba a sobrar demasiado..

Me separe unos milimetros de sus labios solamente para coger aire y luego volvi a besarle lentamente mientras mis manos recorrian sus torso hacia la cintura de sus boxers. No estaba muy segura de lo que estaba haciendo, algo en mi interior me decia que aquello era lo que debia hacer y no le lleve la contraria. Enrosque mis dedos al elastico de su ropa interior y fui bajandola poco a poco mientras besaba sus labios y jugaba con mi lengua dentro de su boca.

Entrelacé mis dedos entre su pelo mientras mi lengua jugaba con la suya en un beso largo e intenso.
Suspiré al sentir sus manos recorriendo mi cuerpo, y noté cómo estas paraban en el eslástico de mis bóxers y me mordí el labio inferior al ver que tiraba de ellos, haciendo obvia mi excitación.
Puse mis manos en sus muslos y los acaricié.

Sonreí inconscientemente mientras me deshacia de sus ropa interior y la dejaba por allí tirada. Bajé mis labios desde su boca hasta su cuello, besandole lentamente. Me tumbe sobre el sintiendo cada centimetro de su piel contra la mia y sin saber muy bien que hacer a continuación. Se me hacía raro estar allí, al aire libre corriendo el riesgo de que alguien pudiese vernos, pero a la vez era muy excitante.

Me estremecí al sentir cómo sus besos bajaban hasta mi cuello.
Mis manos bajaron para volver a posarse de nuevo en su trasero, antes de llevarlas hasta el botón de su pantalon, desabrochandolo y comenzando a bajarlos lentamente.

Le ayude con mis propias manos a bajarme los pantalones. Me sente sobre su estomago paseando mis manos por su torso y acariciandole la mejilla. Estaba tan...guapo... incluso con el pelo lleno de hojas secas. Esa idea me hizo sonreir automaticamente. Me incline para besar su barbilla con cariño.

La miré sobre mi, con cada vez menos ropa. Tenía un cuerpo perfecto, al igual que su rostro. Cerré los ojos al sentir su beso en mi barbilla, y aproveché ese momento para hacerla girar, poniendome yo de nuevo sobre ella.
Mis besos fueron bajando por su cuerpo hasta la zona baja de su tripa, momento en el que me coloqué entre sus piernas y comencé a tirar de sus braguitas, deslizándolas por sus largas piernas hasta quitarselas por completo.

Sonrei mientras le miraba como se desprendia de mi ropa. Me sentia extraña y desee que el mirase a otro sitio que no fuese yo, mis mejillas comenzaron a arder mientras adquirian un color rosado. Le atraje hacia mi tirando suavemente de su mentón para besarle.

La besé en los labios, acariciando sus piernas. Desabroché su sujetador, dejando a la vista sus pechos, los cuales besé con fervor, recorriéndolos con mi lengua.
No despegué mi boca de su cuerpo. Mis besos fueron descenciendo por su tripa, hasta llegar a su sexo. Puse mis manos en sus caderas, pasando mis brazos bajo sus piernas, para pegarla a mi. Jugué con su sexo, acariciando su clítoris repetidas veces con mi lengua.

Cerre los ojos muerta de vergüenza y placer entremezclados. Me removi incomoda pero tambien deseando que no terminase nunca. Era consciente de que Scor hacia eso habitualmente con diferentes chicas... y yo solo era una mas...pero al menos asi podia pasar tiempo con el. Comenzaba a respirar con dificultad soltando suspiros.

Sin dejar de jugar con su sexo subi mis manos, acariciando sus pechos, oyéndola gemir de placer, lo que hacía que mi excitación aumentara. Necesitaba estar dentro de ella.

Acaricie los brazos de Scor sin abrir los ojos, estremeciendome y gimiendo a cada movimiento de la lengua de Scor. Alargue la mano para acariciarle el cabello rubio. Mis caricias era mucho mas cariñosas de lo que yo pretendia.

Moví rápido mi lengua, introduciéndo la puntita dentro de Rose, sintiendo sus caricias por mis brazos. SAboreé su sexo, el cual estaba cada vez más humedo.

Arqueé la espalda de puro placer resoplando tratando de no gemir, lo cual era basante dificil. Abri los ojos para mirar a Scor, bueno en realidad lo que podia ver de el, su cabello rubio. Ese cabello que , aunque me costase admitirlo, me volvia loca. -Ah...Scor, deja de hacer eso...- dije mientras mis mejillas se volvian rojas completamente.